Bienvenidos(as)!

Muchas gracias por visitar nuestro blog. Te invitamos a leer nuestros artículos, opinar y a compartirlos con tus amigos(as) y colegas... Bienvenidos(as) !!!

miércoles, 30 de julio de 2008

La potencia de la TV al servicio de la comunicación interna



Hace un par de años tuve la suerte de liderar uno de los proyectos más interesantes en mi vida profesional. Mientras dirigía las comunicaciones internas en un importante call center multinacional implementé, junto a mi equipo, un canal interno de televisión. Fue una experiencia ardua, apsionante, muy creativa y de gran éxito para la empresa, la que incluso fue distinguida a nivel internacional por esta iniciativa.

Un equipo de cuatro personas, miembros de mi equipo y ex teleopoeradores (editor, camarógrafo, productor y diseñador), eran los encargados de elaborabar una programación miscelanea de 30 minutos, la que se emitía dos veces a le semana en casinos, sitios de acceso y lugares de descanso; a través de una serie de televisores con DVD. Se incluían diversos micro programas o secciones con noticias de la empresa, proyectos estratégicos, entrevistas humanas a ejecutivos, videos de música hechos por los propios empleados, panoramas, humor, prevención de riesgos. etc..

Con más de 200 emisiones, el proyecto no tardó mucho en consolidarse por su gran impacto, potencia comunicacional y orientación estratégica (lo primero era transmitir el proyecto de negocio, después informar y motivar a los empleados y finalmente entretener).

¿Cómo se lleva a cabo un proyecto así?

Antes que nada hay que decir que los canales de TV internos son un excelente alternativa para difundir el proyecto corporativo, lo digo con experiencia empírica. Logran motivar, cohesionar, integrar y entretener a los empleados; sobre todo en grandes empresas con la capacidad financiera y la dotación suficiente como para hacer viable y factible un proyecto de esta naturaleza. Este último punto es importante, ya que se requiere de una inversión inicial no menor (cámaras, luces, mini estudio de grabación, programas de edición, musicalización y efectos) y de un presupuesto significativo para mantener el proyecto.

La implementación de este medio requiere contar con las capacidades profesionales y técnicas que permitan la elaboración de un producto televisivo eficiente y de calidad, que sirva de buena forma a la estrategia de comunicación interna. En este sentido, las personas que integren el equipo del canal interno de TV deben manejar o dominar conceptos de producción, diseño gráfico, manejo de cámara, locución, edición televisiva, dirección de televisión y periodismo televisivo.

El estilo de la programación de un canal interno de TV debe incluir espacios breves, con un uso moderado de efectos visuales y siempre con un ritmo dinámico en el tratamiento de las imágenes. Es conveniente que la programación se renueve en forma semanal o quincenal y que ésta no se exceda de los 30 minutos. Los contenidos y mensajes, por su parte, deben ser lo más directos posibles, muy informativos, breves y con mucho contenido estratégico. No se debe perder de vista que se trata de un medio que sirve a una estrategia comunicacional definida, de acuerdo a un línea editorial definida por la alta gerencia. En este contexto es frecuente, al igual que en los otros medios internos, que los contenidos de esta herramienta comunicacional respondan, en su mayoría, a una agenda previamente definida y elaborada por un comité editorial a principios de cada año laboral.

Las emisiones se pueden transmitir bajo el concepto de circuito cerrado, descargando archivos para protocolo Web (streaming) o simplemente en formato DVD. Muchas compañías que implementan este tipo de medio instalan televisores en espacios masivos (casinos, cafeterías, salas de descanso, recepciones principales, etc.) desde donde se emiten programas de diverso tipo y finalidad (pequeños informativos; espacios didácticos de prevención de riesgos, bienestar, capacitación, etc.; bloques comunicacionales sobre difusión de proyectos estratégicos, objetivos y metas de la organización y difusión de la identidad y cultura corporativa; programas de entretención -humor, música, deporte, cultura, etc.-; espacios de reconocimiento -entrevista humana-, orientado a aquellos empleados que destacan en sus labores; y secciones de producción dramática –donde la idea es recrear historias y experiencias singulares que viven los empleados de a empresa-).

Finalmente, es imprescindible hacer partícipe a toda la organización en los distintos programas que se emitan(ojala integrar la mayor cantidad de personas posible) , ya que así se aprovecha la potencia e impacto de un medio como éste en pro del desarrollo de la pertenecia e identificación con la empresa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario